Después de adquirir un vehículo, y pasado el periodo de garantía que proporciona el fabricante de la marca, llega el momento de tomar decisiones en lo relativo a sus cuidados y mantenimientos periódicos ya que de las buenas prácticas de estas revisiones dependerá la mayor o menor vida útil del mismo. Se hace por lo tanto impresincible que dichas revisiones no sólo sean realizadas por personal  cualificado, si no que además se hagan en unas instalaciones correctamente preparadas y habilitadas para poder gestionar correctamente la revisión de un vehículo de una determinada marca o fabricante ya que no todos los talleres están 100% preparados para atender correctamente a cada modelo específico de vehículo.

La vida útil de un vehículo cualquiera depende de un mantenimiento adecuado que además tenga en cuenta las últimas herramientas y avances tecnológicos para poder atender correctamente cada uno de los puntos de la unidad a revisar ya que cada vez contienen más componentes electrónicos y motores más complejos que hace que cualquiera no sea apto para su correcta gestión en taller. Sólo personal y mecánicos debidamente formados y experimentados sabrán atender sin ningún tipo de riesgo cualquiera de las incidencias que pueda presentar el vehículo, o lo que es más importante: prevenirlas.

Experiencia y profesionalidad

Los talleres no oficiales sin embargo no cuentan con una formación 100% específica para todos los modelos y marcas, además de que su personal suele rotar bastante y la experiencia de los mecánicos nunca será igual a las de un taller oficial por simple estadística, y es que un mecánico de un taller no oficial nunca podrá igualar en núumero de horas la experiencia sobre una determinada marca que atiende en exclusiva a diferencia de los talleres multimarca que dicen ser aptos para todos los vehículos cuando en realidad no resulta ser así y muchas reparaciones o revisiones resultan ser poco profesionales y con pésimos resultados e incluso riesgo de accidentes.

Hay que tener en cuenta que un taller oficial  incluso se anticipa a cosas que todavía no han trascendido en tu vehículo simplemente porque sabrán donde y cómo mirar sin que les tengas que dar apenas información. Ellos mismos sabrán ver mucho más allá de lo que lo haría cualquier otro taller que tiene menor experiencia en una determinada marca no solo por la reparación/revisión en sí, sino también porque cada vehículo requiere una calibración concreta y experimentada de todos los puntos más importantes, tanto antes como después de la intervención.

Garantía de verdad

Los servicios oficiales, como por ejemplo el de Opel en Barcelona permiten además maximizar la garantía de su vehículo, no sólo por el hecho de ser atendido por profesionales cualificados, sino porque además cada cambio de piezas se realizará siempre con piezas originales de la marca minimizando así cualquier problema futuro que suelen presentar los recambios low cost, genéricos, o lo que es peor, piezas de desguace.

Los servicios oficiales emplearán tanto dispositivos como herramientas perfectamente adaptadas a las nuevas tecnologías facilitando así todo el proceso de revisión de su vehículo y haciendo además que se reduzcan los tiempos de intervención y por lo tanto el coste final que se repercute al cliente.

Máximo nivel de atención y de calidad

Todos los talleres oficiales cumplen los protocolos de calidad más estrictos, y es que trabajan permanentemente para establecer la mejor diagnosis para llevarla a término en el menor tiempo posible y con el menor coste posible.